Salvini vuelve a la carga con su propio concurso en redes sociales. Con una puesta en escena al más puro show de variedades, el ministro-presentador anuncia que el ganador conseguirá hablar por teléfono con él. Todo para hacer campaña en las elecciones europeas.

Con una popular rumba, Marine Le Pen amenizaba uno de sus últimos mítines. Música española para animar al electorado galo. Sin embargo, a Le Pen se le borraba la sonrisa tras publicarse una foto junto a un neonazi. Ambos hacen un gesto que, para los supremacistas, significa "poder para los blancos". Le Pen se ha defendido asegurando que lo ignoraba.

La candidata de Macron protagoniza un videojuego donde debe recoger 12 estrellas, las de la bandera europea, luchando contra criaturas como Le Pen o Trump.

Pero lo más llamativo escapa a las europeas para dar la vuelta al mundo. Un anuncio electoral de un diputado danés colgado en una página porno. Joachim Olsen lanza así un mensaje para que cuando los internautas terminen de "usar" la web vayan a votarle.

No sólo hay métodos originales para captar votos, también para reclutar personal. Con un vídeo el presidente electo de Ucrania, excómico, abre casting para encontrar a su portavoz de Gobierno. Es la nueva política-espectáculo.