El pacto PP-Ciudadanos en la Comunidad de Madrid está pendiente de un nombre. Álvaro Ballarín. El número siete en la lista de Cristina Cifuentes.

Imputado, pero curiosamente hasta el viernes pasado. A Ballarín se le retiró la imputación por prevaricación, falsedad en documento público y desobediencia dos días antes de las elecciones. La acusación retiró la querella y se archivó el caso.

Al enterarse de esta información, Ciudadanos ha bloqueado las negociaciones con el PP de Cifuentes. La popular ha respondido rápido para que no descarrile un posible acuerdo para gobernar en le Comunidad de Madrid. Dice Cifuentes que Ballarín ha puesto su cargo a disposición.

Y en aguas revueltas, los socialistas no renuncian ahora a que Ángel Gabilondo pueda presidir la CAM. Cortejar a Ciudadanos para una hipótetica abstención y el apoyo de Podemos podría darles la deseada presidencia de la comunidad.