El Govern de Junts per Catalunya y ERC, al borde de la ruptura. La tensión es latente desde que Llarena suspendió a los diputados presos y a Puigdemont.

Para no perder la mayoría, Llarena permitió a los políticos suspendidos designar sus funciones a otro diputado. ERC decidió designar el voto en Sergi Sabriá, tal y como pactaron con JxCAT. Pero la formación de Torra rompe el pacto y sigue con la delegación de voto.

Para la CUP, la postura de JXCat no cambia nada. Mientras, Inés Arrimadas amenaza con presentar una querella contra la Mesa del Parlament. "No podemos estar aquí mirando impasibles como se pone en cuestión la legitimidad de este Parlament", afirma la líder de Ciudadanos en Cataluña.

Las discrepancias entre los independentistas van creciendo desde el ultimátum de Torra a Pedro Sánchez.

Torrent da un plazo de una hora a Junts per Cataluña para que presenten los documentos de forma individual. Asegura que habrá pleno por la tarde.