La intensa lluvia de este 12 de octubre ha teñido de gris el desfile de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, que este año ha visto cómo se cancelaba el desfile aéreo tradicional por cuestiones de seguridad.

La Patrulla Águila debería haber cerrado este desfile del 12 de octubre pintando el cielo de Madrid con los colores de la bandera de España, sin embargo las condiciones lo han impedido. Tampoco han podido realizar su salto en paracaídas los tres miembros de la patrulla acrobática del Ejército del Aire, que cancelaban su especial entrega de la bandera por motivos de seguridad ante las inclemencias del tiempo.

Muchos de los asistentes abandonaban también su posición para ver el desfile, aunque otro muchos permanecían de pie para ver a los más de cuatro mil miembros que han participado en este acto.

Las distintas autoridades del país disfrutaban bajo techo en el palco habilitado junto a la tribuna real, encabezada por el rey Felipe VI, la reina Letizia y la princesa de Asturias, Leonor, que este año lucía el uniforme de Guardia Marina, adornado con la banda de la orden de Carlos III.

Con algún que otro percance producido por la lluvia, lo cierto es que todos y todas han desfilado aguantando el tipo, incluida la ya famosa cabra de la Legión. Y es que este año, en vez de cabra, era borrego: se trataba de Killo, un borrego de seis años con seis kilos de peso y pelaje blanco.

Termina así una ceremonia muy lluviosa, pasada por litros de agua pero cargada también de tradición y mucha emoción.