La nueva ordenanza municipal que ha aprobado el Ayuntamiento de Madrid va a reducir un 90% las viviendas de carácter turístico en la capital de la comunidad. Hay varios puntos clave en esta nueva normativa que ha impulsado el gobierno de Carmena.
Entre ellos, que se podrá cualquier piso como turístico siempre que no supere el límite de tres meses. Esto es, 90 días en los que sí se podrá usar dicha residencia como vivienda vacacional.
En caso de superarse, este piso necesitará una licencia de hospedaje. Además, la vivienda tendrá que contar con un acceso y un ascensor que sea independiente del resto del edificio. En este sentido, en caso de que un edificio entero se quiera destinar al alquiler turístico tendrá que tener la aprobación municipal.
Esta normativa será de aplicación inmediata: se dividirá Madrid en anillos concéntricos, de forma que esta normativa se aplicará de forma más o menos laxa. Así, los barrios situados en las zonas más céntricas tendrán una aplicación más estricta.