Eduardo Zaplana se valió de su cargo público para asignar contratos públicos a las empresas de la familia Cotino a cambio de más de diez millones de euros. Es la conclusión que saca la UCO y que forma parte del sumario del caso Erial al que que ha tenido acceso laSexta.

Dentro de ese sumario se recoge una conversación entre el que fuera president de la Generalitat con Fernando Belhot, supuesto testaferro de Ignacio González. En esa conversación, Zaplana le reconoce al abogado uruguayo quiere realizar una serie de inversiones, pero que, según la UCO, Ignacio González no le está enviado el dinero necesario.

"Para todo esto, para algunas cosas que a mí me pide, necesito liquidez... A mí, Ignacio (González) no me está dando (ininteligible) dinero de Andorra". Preguntado sobre por qué no utiliza parte de su patrimonio en el extranjero, el exministro del PP le confiesa que sería muy arriesgado.

"(…)No puedo sacar cinco millones de... primero, porque no los tengo ahora; (…) pero segundo, es que aunque los tuviera... aquí en España me van a decir, ¿usted dónde va?", se puede escuchar decir a Zaplana. Poco más de un mes despues de esta conversación, ingresaba en prisión acusado de hasta diez delitos.

Tras ocho meses entre rejas, la jueza le dejó en libertad provisional al localizar y bloquearle más de seis millones de euros en Suiza que se suman a los otros seis que ya le decomisó entre efectivo y patrimonio que supuestamente reintrodujo en España gracias a la Amnistia fiscal de Cristóbal Montoro.