El acuerdo entre PSOE y Junts está cerrado. Sin embargo, las dudas alrededor de los matices que puede encerrar el documento son tan grandes como las críticas recibidas en las últimas horas por parte de la oposición y de los jueces, que ponen en duda que la ley de amnistía ponga en peligro la separación de poderes.

El resumen es que Carles Puigdemont hará presidente del Gobierno a Pedro Sánchez a cambio de una ley de amnistía y de un verificador internacional. En el resto, se observa un "ya veremos" que sigue arrojando dudas ante una investidura que parece cada vez más cercana. Puigdemont también cede al votar 'sí' en la investidura antes de aprobar la amnistía, subordinando, además, un hipotético referéndum a la Constitución.

La primera división nace de si esto es un acuerdo de investidura o de legislatura. El PSOE habla de legislatura, mientras que Puigdemont supedita la estabilidad del acuerdo a que "pasen cosas" estos cuatro años.

Otro punto de discordia es si Cataluña es o no una nación. Aquí, de nuevo, puntos totalmente contrarios, con Santos Cerdán reconociendo que ha sido "uno de los debates importantes" en esta negociación: "Quiero recordar que la propia Constitución habla de nacionalidades. Es uno de los temas que tenemos que seguir hablando".

También quedan dudas por la propia ley de amnistía, con casos descartados como el del abogado de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, acusado de narcotráfico y blanqueo, así como el de la dirigente de Junts Laura Borrás, condenada por prevaricación.

El acuerdo recoge que habrá comisiones parlamentarias para investigar si ha habido una instrumentalización de la justicia, unas comisiones que se hacen para saber la verdad, según Puigdemont. Aunque hemos visto las firmas de Santos Cerdán y de Jordi Turull, lo que no se ha dado es una foto entre los protagonistas del acuerdo.

Las concesiones de PSOE y Junts en su acuerdo

Las posiciones han cambiado mucho en los últimos meses con las negociaciones entre PSOE y Junts. Pedro Sánchez se negaba a que hubiese una amnistía, al considerarla ilegal. Ahora, esa amnistía le puede llevar a ser reelegido como presidente del Gobierno.

La unilateralidad mostrada por parte de los independentistas también ha sido dejada de lado, tanto por Junts como por ERC. Pero es que Puigdemont también ha cedido en una afirmación muy contudente que dijo sobre Sánchez, cuando aseguró que el candidato socialista no sería presidente del Gobierno porque es un mentiroso.

Este mismo jueves se votaba en el Parlament de Cataluña la propuesta de la CUP para hacer otro referéndum de independencia por la vía unilateral. Junts y ERC han votado en contra, han dicho 'no' a la unilateralidad y han dejado solos a los diputados de la CUP.