La CUP-Crida Constituent se compromete a renovar su grupo parlamentario, que seguirá formado por diez diputados, para "visualizar un cambio de etapa y asumir implícitamente la parte de autocrítica que le corresponde" en la gestión del proceso negociador, según el texto del acuerdo remitido por la CUP.
Estos relevos se producirán "inmediatamente después del pleno de investidura", en el que también se comprometen a investir en la primera votación al candidato presentado por JxSí, Carles Puigdemont.
El texto recoge autocríticas por parte de la CUP, que admiten que pueden "haber puesto en riesgo" el impulso del proceso soberanista y haber desgastado la base social del independentismo.
Reconocen "errores en la beligerancia expresada hacia JxSí", y aseguran que defenderá activamente a todos los agentes que hacen posible el proceso.
También se comprometen a no votar "en ningún caso" en el mismo sentido que los grupos parlamentarios contrarios al proceso y el derecho a decidir cuando esté en riesgo la estabilidad parlamentaria.
Además, dos diputados de la CUP se incorporarán a la dinámica del grupo parlamentario de JxSí de manera estable: "Participarán en todas las deliberaciones y actuarán conjuntamente en las tomas de decisión del grupo para dar cumplimiento" a la estabilidad parlamentaria.