Un año más la división marca el homenaje anual a las victimas del terrorismo, acto institucional que cada 27 de junio desde 2010 se celebra en el Congreso. PP y VOX junto a la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Covite y Dignidad y Justicia no se han sumado al acto, rechazando la presencia de Bildu y sus pactos con el Gobierno.

Mientras se celebraba, la formación de extrema derecha ha manifestado a los medios de comunicación sus razones. "Vox no acude porque está presente Bildu, el brazo político de ETA", ha incidido su portavoz, Iván Espinosa, que ha arremetido contra el Gobierno por traicionar a las víctimas.

Sí que han asistido los portavoces del PSOE, Patxi López; del PNV, Aitor Esteban y EH Bildu, Oskar Matute, quien ha declinado hacer declaraciones. Sí ha hablado Aitor Esteban quien ha tildado de "necesaria" su presencia en un homenaje que recuerda lo ocurrido y apela a que no se repita, mientras que Patxi López ha calificado de "penosa" la representación del PP al no guardar la "institucionalidad" de un acto que decidió por unanimidad el Congreso de los Diputados.

Presidido por los presidentes del Congreso, Meritxell Batet, y del Senado, Ander Gil, y la presencia del ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, y de responsables de las fuerzas de seguridad, el presidente de la Fundación de Víctimas del Terrorismo ha leído un duro discurso en el que no ha faltado el reproche a los diputados tras una legislatura en el que las demandas de las víctimas han quedado sobre la mesa.

Hijo del concejal de UPN Tomás Caballero, asesinado por ETA en 1998, el presidente de la FVT ha clamado a los diputados a que en la próxima legislatura "vuelvan a ver a las víctimas y a los terroristas en su verdadera dimensión". "Les pido que ante situaciones tan dolorosas como la de ver en las listas electorales a condenados por atentados terroristas den un paso al frente y profundicen en la legislación. Eviten que puedan convertirse en representantes de la soberanía popular quienes trataron de destruir los pilares de nuestra convivencia", ha instado.

"Por dignidad democrática, los condenados por delitos de terrorismo deberían verse privados del derecho de sufragio pasivo de por vida", ha enfatizado Caballero tras recordar la "paradoja" de un sistema que prohíbe a un pederasta trabajar con menores pero permite que quienes asesinaron a diputados o concejales pueden aspirar a sentarse en sus escaños.