El debate por los Presupuestos Generales del Estado no ha estado protagonizado por las enmiendas o los contenidos de las cuentas públicas, sino por los insultos y las amenazas de los diputados de Vox.

Este miércoles, mientras María Jesús Montero contestaba a una de las intervenciones de Iván Espinosa de los Monteros, uno de los dirigentes del partido de extrema derecha gritó "gilipollas" desde la bancada de su partido.

Así lo han confirmado a laSexta fuentes de la Mesa del Congreso, situados en una situación privilegiada en el hemiciclo y con buena acústica y visión.

Al terminar su intervención, la ministra de Hacienda se dirigió al portavoz de Vox en el Congreso para decirle que amonestara a su diputado ante el insulto que acababa de recibir. Si bien, este se limitó a mirar hacia atrás y no emitir respuesta alguna. "Me gustaría que, cuando termine la sesión, le amonestara por el insulto que acaba de pronunciar desde el escaño", señaló desde la tribuna.

La vicepresidenta segunda de la Cámara Baja, Ana Pastor, instó al diputado a que retirara el insulto. Sin embargo, este no lo hizo y ella informó de que la Presidencia actuaría en consecuencia. "Lo retirará la Presidencia y no lo repetiré por respeto", añadió al respecto.

Pero este no fue el único 'incidente' que protagonizó el partido de Santiago Abascal. Y es que, cuando Joan Baldoví les acusó de abandonar el PP por falta de "alimento", Juan Luis Steegman le dijo que repitiera eso en la calle.

"Desenmascarar la hipocresía de unos chaqueteros que abandonaron y desertaron del Partido Popular cuando se acabaron las ubres que las amamantaban creo que está bien que se haga en este Congreso", apuntó el portavoz de Compromís. Unas palabras que Steegman le instó a repetir frente a Abascal, a lo que el político valenciano contestó: "Donde quieras y cuando quieras".