En el juicio del 'procés', por primera vez, el fiscal del Tribunal Supremo ha pedido la deducción de testimonio para uno de los testigos, y no era un testigo cualquiera, sino el secretario de Difusión Institucional de la Generalitat de Cataluña, Jaume Mestre.

La deducción de testimonio significa que se le abra una nueva causa penal por un delito de falso testimonio, ya que el fiscal considera que las respuestas que estaba dando a sus preguntas no se ajustaban a la promesa o juramento que ha hecho al principio de la declaración de decir la verdad.

El presidente del Tribunal, Manuel Marchena, le ha llegado a advertir en un momento determinado de que no podía contestar con evasivas a las preguntas que se le estaban formulando sobre dos campañas de publicidad que fueron emitidas en la Corporación Catalana de Medios de Comunicación. No obstante, hay pruebas en el sumario de que él pidió ese encargo y también de que le reclamaron el dinero que costaron. Finalmente, la Fiscalía ha pedido que se le deduzca el testimonio.

El Tribunal decidirá si finalmente se lleva a cabo pero, hasta el momento, Marchena ha explicado que no se podía anticipar ninguna cuestión sobre ese asunto.

También ha declarado el que fuera secretario general del Diplocat, que ha dicho que los observadores internacionales que acudieron al referéndum del 1-O en realidad no eran observadores internacionales, sino expertos que estaban realizando un diagnostico político sobre la situación en Cataluña.