La Puerta del Sol ha vivido un 2 de mayo significativa -y sorprendentemente- más tranquilo este año, tras el sonado choque frontal que protagonizaron Moncloa y el Ejecutivo de Isabel Díaz Ayuso en los actos de 2023, al punto de impedir al ministro Félix Bolaños subir a la tribuna de autoridades para el desfile militar.

Una tensísima situación que dista mucho de la vivida este jueves: esta vez, los actos institucionales han transcurrido sin revuelo -más allá del enredo con un paracaídas durante el desfile-, sin conflicto por la representación institucional y ni tan siquiera una alusión velada a Pedro Sánchez en el discurso de Ayuso, a pesar de que en los últimos días su partido ha redoblado la ofensiva tras el periodo de reflexión del presidente y su decisión de continuar al frente del Gobierno.

Sí ha llamado la atención, no obstante, la ausencia de miembros de la dirección nacional del PP: si el año pasado estuvo presente el propio Alberto Núñez Feijóo, que incluso subió a la tribuna de autoridades de la que se vetó a Bolaños, este año el líder de los 'populares' no ha acudido, como tampoco lo han hecho otros miembros de la cúpula de Génova.

Una ausencia que fuentes socialistas califican de "espantada". "Los grandes nombres" del PP, dicen, "han dejado sola a Ayuso" en "uno de sus días grandes por excelencia". Una situación que relacionan con el presunto fraude fiscal de la pareja de la presidenta autonómica, la reunión de este con su 'número dos' en el PP madrileño, Alfonso Serrano, o las amenazas de su jefe de gabinete a los medios de comunicación. "Ayuso cada día está más sola. Su propio partido ha huido de los actos del dos de mayo", sostienen.

Desde el PP madrileño, el propio Serrano ha restado importancia a la no asistencia de Génova a preguntas de laSexta. "No tengo ningún problema con la dirección nacional, nos sentimos absolutamente respaldados", ha asegurado, apuntando que Feijóo "a lo mejor está conciliando, que también nos vendría bien un poco a todos".

Por parte del Gobierno central, este año el único representante ha sido el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, que sí ha tenido su sitio en la tribuna, después de que el año pasado los responsables de Protocolo de la Comunidad de Madrid dejaran a Bolaños fuera, tras las acusaciones de Sol al ministro de 'autoinvitarse' al acto institucional, aduciendo que el Ejecutivo ya estaba representado por la titular de Defensa, Margarita Robles.

A Torres, sin embargo, se le ha podido ver conversando cordialmente con la presidenta madrileña. Una imagen muy diferente a la que presenciábamos hace justo un año.