Seat, Mercedes-Benz y Volkswagen han sido los tres primeros fabricantes de automóviles en retomar la producción de vehículos en España, donde las doce plantas de ensamblaje que hay en el país permanecían paradas desde mediados de marzo por el coronavirus. Una de las plantas que ha reabierto por primera vez desde el 15 de marzo es la de Volkswagen en Navarra.

Los empleados de esta fábrica navarra se han encontrado varios cambios al regresar a su puesto de trabajo: marcas en el suelo para guardar la distancia de seguridad mientras les miden la temperatura y les dan o no luz verde para entrar.

Un control de seguridad que también se repite con los que llegan en su coche. Solo 1.500 empleados de los 5.000 que debería haber han vuelto a su turno hoy en una fábrica que ha dejado de montar 40.000 coches que ahora vuelven a salir.

En la fábrica de Seat de Martorell, Barcelona, también han vuelto con gel desinfectante y repartiendo mascarillas, pero solo lo han hecho 3.000 empleados de los 11.000 que suele haber.

Allí es obligatorio que las puertas se abran con el antebrazo y las escaleras están divididas para que solo se puedan utilizar en un único sentido.

El sector pide al Gobierno estímulos en la compra de vehículos e incluso algunos exigen que se dejen de lado las políticas que penalizan a los no eléctricos.