Semanas después del encuentro entre la testigo protegida y los futbolistas en un hotel de Madrid, se produce una conversación sobre el dinero que pagaron por la visita al hotel. La joven no se fía de su jefe, Torbe, y se pone en contacto con De Gea, que le deriva a su compañero Muniain.

Esta es una de las nuevas conversaciones que saca a la luz la revista 'Interviú'. En otra, la testigo también se refiere al portero para un supuesto nuevo encuentro con jugadores; esta vez, en Manchester.

"Se advierte la relación de ella con su proxeneta, donde le pide permiso para todo: para hablar con De Gea, para ir supuestamente a Manchester a una orgía con cinco futbolistas", advierte Luis Rendueles, subdirector de la revista 'Interviú'.

Según la policía, esto no demuestra que los futbolistas hayan cometido ningún delito, porque todos los indicios demuestran una relación adulta y consetida. No obstante, el escándalo se ha colado de lleno en la campaña electoral, con pedro Sánchez a la cabeza.

"Yo no me siento cómodo viendo a De Gea como portero de la Selección Española después de ver su nombre salpicado y denunciado por una menor", explicaba Pedro Sánchez, durante una entrevista con 'eldiario.es'.

Estas declaraciones han provocado una cascada de reacciones. Albert Rivera ha criticado su postura y ha pedido precaución. Por su parte, Esperanza Aguirre le ha lanzado un duro mensaje: "Me parece intolerable que a cualquier persona, ya sea futbolista o político, se le descalifique y se le destroce la vida sin una sola prueba.

El que sí se ha sumado a la postura de Pedro Sánchez ha sido Íñigo Errejón. "Si no da buenas explicaciones no creo que sea una figura ejemplarizante", ha señalado el número dos de Podemos, durante una entrevista en El Español. Un referente social que en estos momentos está en entredicho.