Entre los más de 1.000 nuevos documentos entregados por David Marjaliza, hay uno de especial relevancia: demostraría que la fortuna de Francisco Granados ascendía a decenas de millones de euros.

Se trata de un archivo excell enviado por el que era jefe de gabinete de Granados, Ignacio Palacios, a Marjaliza, en el que se valora la empresa Servicio Patrimonial en 133 millones.

Oficialmente el 49% de esa compañía lo controlaba el propio Marjaliza, otro 49% Ramiro Cid, también empresario de Valdemoro, y un 2% la mujer de Palacios.

Según Marjaliza, era un reparto falso para ocultar la identidad de Granados. Al juez le contó que en realidad se dividía en tres partes iguales: una suya, otra de Cid y otra de Granados.

Es clave, según Marjaliza, una de las columnas del archivo: en ella se divide la valoración en tres partes. El empresario asegura que de esos 133 millones a él le pagaron 33,5 millones, por lo que, según él, Granados se habría llevado al menos esa misma cantidad.

El arrepentido dice también que Granados miente al decir que cerró su cuenta en Suiza en 2005. Según él, fue en 2007 y para hacerlo Granados habría enviado el dinero a otra cuenta a su nombre.