Hay una manera de llegar lejos en la diplomacia sin estudiar para ello y es el cargo de cónsul honorario. En España hay 499 cónsules con ese título que representan a otros países reaprtidos por 63 ciudades: los puedes encontrar en el mapa situado bajo estas líneas y en el buscador que hay un poco más abajo. A su vez, España tiene también en torno a 500 consulados con funcionarios honorarios repartidos por 143 países. Como anécdota, el polémico empresario y político Jesús Gil intentó alcanzar ese cargo, pero no lo consiguió.

Los cónsules honorarios son diplomáticos voluntarios nombrados a dedo sobre los que, además, no existe apenas control. Ahora, gracias a la investigación 'Diplomacia en la sombra' ('Shadow diplomats') sabemos nuevos datos sobre este discreto y desconocido mundo que algunos han usado su estatus para enriquecerse, ocultarse, realizar actos de terrorismo, evadir la ley o promover la agenda política de su país. Eln el siguiente mapa puedes ver dónde se ubican en España.

El Ministerio de Exteriores tiene registrados en España hasta 499 diplomáticos honorarios de otros países que están repartidos por 63 diferentes municipios. Aunque es más frecuente encontrarlos en las capitales de provincia, estos se alojan en muchos casos en ciudades más pequeñas, como Dénia (Alicante), o Torremolinos (Málaga), o en zonas costeras con mucha población extranjera.

La ciudad que más cónsules honorarios reúne es Barcelona, con 58, seguida de Bilbao y Valencia, con 38 en ambos casos. Al contrario, hay hasta 11 provincias, casi siempre las menos pobladas, que no cuentan con ningún diplomático honorario, como Soria, Teruel, Lugo o Jaén.

En el siguiente listado puedes consultar a qué país representan, dónde se ubican, quiénes son y cuándo se incorporaron al cargo. Para ello, puedes simplemente navegar por las páginas o introducir cualquier término en el buscador.

Esta nueva investigación está liderada por el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ, por sus siglas en inglés) y por el medio de comunicación estadounidense ProPublica; laSexta participa como medio español junto a El País y El Periódico de Cataluña.

Un proyecto en el que han participado más de 150 periodistas de 46 países y que ha desvelado cómo algunos han usado su estatus para enriquecerse, ocultarse, realizar actos de terrorismo, evadir la ley o promover la agenda política de su país. Por primera vez toda esta información se recoge en una base de datos.

500 cónsules en España

A partir del listado publicado sobre estas líneas se puede apreciar que el cónsul honorario de un país no es necesariamente un ciudadano natural de ese país, sino que a menudo es originario de aquel en el que mantiene la oficina.

Por países, los ingleses y franceses son los que más extendidos están por el territorio español, con 26 y 21 cada uno, pero encontramos cónsules honorarios de más de 100 países.

Además, en esta investigación se han identificado más de 500 cónsules en todo el mundo involucrados en escándalos políticos o penales en los últimos 60 años. Con los beneficios que implica este cargo, algunos de estos cónsules han estado relacionados con corrupción, narcotráfico, grupos terroristas o contrabando de armas. 29 de ellos están vinculados a España, como el 'clan Jodorovich', uno de los clanes de narcotráfico más importantes de Cataluña, compuesto por José Luis López Fernández (excónsul de Mali), José María Calmet (Albania) y Juli Bárcena San José (Croacia).

Cónsules "españoles" por el mundo

Por otro lado, España mantiene 501 consulados honorarios repartidos por el mundo. Abogados, profesores universitarios, empresarios... El perfil es diverso y cada país nombra a los suyos bajo sus propias reglas. Y también vetar, como hizo con el empresario, político y expresidente de Atlético de Madrid, Jesús Gil, cuando trató de conseguir el consulado de Costa de Marfil a propuesta del país africano.

Otro nombre también relacionado con el fútbol es el de Joan Gaspart, empresario hotelero y expresidente del FC Barcelona que mantiene su consulado honorario de Seychelles en Barcelona desde 1983.

Jordi Pujol Ferrusola, Rosario Porto o Jordi Sumarroca son otros nombres españoles que aparecen en esta investigación liderada por el ICIJ y Propublica y que destapa el lado más oscuro de un cuerpo que nació como figura de auxilio para naciones sin presupuesto para embajadas en el exterior, pero que ha acabado desfigurándose y cayendo en manos de poderosos o de personas que buscan nada más que beneficiarse de sus privilegios.