Ante unas elecciones casi inevitales, el calendario pre-electoral en Cataluña se aprieta, y es que si el domingo no hay investidura, el lunes Mas firmará el decreto de convocatoria de nuevas elecciones, y a partir de entonces se abriría un periodo de diez días para que los partidos decidan si quieren ir o no en coalición.

La primera pregunta que surge es si se repetirá la coalición Junts Pel Sí, algo que para Josep Rull deja claro que "fue una herramienta ganadora y que habrá que explorar".

Sin embargo, de quien depende que Junts pel Sí vuelva a presentarse es de Esquerra Republicana, aunque Oriol Junqueras ni confirma ni desmiente, y pide "no hablar de escenarios alternativos que distraigan, porque ya habrá tiempo.

Junqueras insiste en seguir negociando, pero lo cierto es que tras su éxito en solitario el 20D, la fórmula Junts pel Sí ya no convence, y mucho menos tras las duras críticas de Mas hacia la CUP, que no perdonaría que Esquerra repitera coalición.

La otra incógnita es que pasará con la izquierda no independentista. Tras el fracaso en las autonómicas, Podemos quiere enterrar la marca Catalunya Sí Que es Pot para apoyar la de En Comú Podem.

Esta marca apoyada por Pablo Iglesias lleva el sello Ada Colau, pero ella se desmarca, afirmando que tiene que respetar a los ciudadanos de Barcelona, que son los que la han elegido alcaldesa. Muchas incógnitas para llegar a unas elecciones que serán las cuartas autómicas en más de cinco años.