Analizamos el cambio de estrategia que ha dado Pedro Sánchez desde que presentara su dimisión como líder del PSOE aquella fatídica tarde de octubre de 2016. En aquel momento, parecía que la carrera de Sánchez en la política había llegado a su fin. Ahora, un año y medio después se ha alzado como presidente del Gobierno. ¿Qué ha pasado durante ese lapso de tiempo?
Que la imagen que tenía toda España del dirigente socialista ha cambiado. Pocas semanas después de su renuncia forzada a continuar al frente del PSOE, Pedro Sánchez parecía tener preparada una nueva cara dispuesta a arrasar en la polémica. De la noche a la mañana, se convirtió en el revolucionario candidato de las bases.
Su objetivo era claro: recuperar la idea del PSOE de tintes innovadores y progresistas que había triunfado en España en la década de los 80. Se echó a la carretera para visitar numerosos pueblos y ciudades, donde cerraba los actos a tenor del himno de la Internacional, con el puño levantado en señal de victoria.
Y victorioso salió de esa campaña como candidato de las bases socialistas tras ganar, el 21 de mayo de 2017, las primarias del PSOE, imponiéndose con más del 50% de los votos a Susana Díaz y Patxi López. El silencio se volvió a imponer durante un tiempo en la vida política de Pedro Sánchez hasta que se asestó el golpe definitivo.
Moción de censura, apoyos suficientes y logra convertirse en un año y medio en un político con doble récord: ser el secretario general del PSOE que menos votos ha logrado en unas elecciones y ser el primer candidato en alzarse presidente tras una moción de censura. A partir de entonces, Pedro Sánchez ha roto su silencio y ha vuelto a cambiar un tanto su rostro político.
Ahora no es tan revolucionario, pero sí parece buscar una imagen moderna de su Gobierno. El ejemplo: la foto que ha publicado su gabinete cuando viajaba a bordo de un avión con dirección a Alemania. Gafas de sol en ristre, centrado en el trabajo y escuchando a su compañero. Muchos han querido ver en esta imagen reminiscencias de otra fotografía, tomada años atrás, en la que el escenario era el mismo, si bien el protagonista era Kennedy.
El abogado Antonio Camuñas ha apuntado más alto. En un interesante hilo de Twitter, ha asegurado que los asesore de Sánchez "andan buscando su #JackLowe (Kennedy) o su #PeteSouza (Obama)", refiriéndose a los fotógrafos que acompañaban siempre a los dirigentes políticos. Camuñas analiza las intenciones políticas que parece esconder esa imagen, y la evolución fotográfica del propio Sánchez.