La iniciativa solo ha sido rechazada por el Partido Popular y sus socios UPN y Foro Asturias, mientras que Ciudadanos ha decidido abstenerse. La proposición de ley fija un calendario de subida progresiva de este suelo salarial durante la presente legislatura hasta alcanzar los 950 euros mensuales en 2020.

Así, la confluencia de izquierdas pretende fijar una cuantía de 800 euros mensuales --equivalentes a 11.200 euros anuales-- en enero de 2018 e incrementarlo hasta los 950 euros mensuales --equivalentes a 13.300 anuales-- en 2020.

La iniciativa también recoge que cada año el Gobierno revise, tras consultar a patronal y sindicatos, la cuantía de este salario mínimo, teniendo en cuenta "las necesidades de trabajadores y sus familias habida cuenta del nivel general de salarios en el país y el coste de la vida", la productividad media nacional alcanzada, el incremento de la participación del trabajo en la renta nacional y la coyuntura económica general.

En todo caso, Unidos Podemos y sus confluencias quieren blindar este suelo salarial --impidiendo su recorte en el futuro-- y asegurar un incremento anual del mismo que iguale, como mínimo, las previsiones de inflación.

En caso de que el Indice de Precios de Consumo (IPC) real superara a las previsiones, la formación que lidera Pablo Iglesias pretende que los salarios se revisen con carácter retroactivo desde el 1 de enero de ese año.

Desde el grupo confederal advierten de la brecha existente entre los 655,20 euros mensuales que hay en España y los del resto de los países de la Unión Europea, poniendo como ejemplo a Francia (1.462 e/m) o Reino Unido (1.202e/m).

Asimismo, han recordado los "graves incumplimientos" en materia de derechos humanos que señalaba el Comité Europeo de Derechos Sociales en su informe anual de 2015.