El conductor detenido por el atropello mortal de seis personas en un control de la Guardia Civil en Los Palacios (Sevilla), circulaba a una velocidad correcta. Según ha podido saber laSexta, el tacómetro ha confirmado que el camionero iba a unos 90 kilómetros por hora.

Los investigadores tampoco han encontrado droga en la cabina del camión. A esta hora no se descarta ninguna hipótesis.

Prisión provisional para el camionero

Por ahora, el juzgado ha enviado a prisión provisional al conductor por la existencia de riesgo de fuga y de destrucción de pruebas, según trasladan fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía a laSexta.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Utrera, en funciones de guardia, acordaba este martes, a petición de la Fiscalía, el ingreso en prisión provisional, comunicada y sin fianza del transportista, que había sido detenido tras arrollar un control policial en la madrugada del martes en la AP4, matando a seis personas -dos de ellas guardias civiles- e hiriendo de gravedad a otras tres.

En el auto, el juzgado justifica esta decisión señalando que los hechos que se le imputan son constitutivos en principio de seis delitos de homicidio imprudente y tres de lesiones graves por imprudencia, con lo que la potencial condena "rebasa con creces" el requisito exigido en la Ley de Enjuiciamiento Criminal para dictar prisión provisional.

Además, cree que "existen indicios suficientes para considerar" al detenido como autor de los hechos, por los indicios que derivan del propio atestado de la Guardia Civil, donde consta que conducía el camión, un extremo que él mismo ha reconocido.

Dos de los fallecidos tenían antecedentes relacionados con la droga

El punto donde se realizaba el control de la Guardia Civil se trata de una de las zonas calientes de la lucha contra el narcotráfico del Campo de Gibraltar; de hecho, dos de las seis víctimas mortales del atropello que se produjo este martes tenían antecedentes por narcotráfico.

Es por ese motivo que la Guardia Civil sospechó del conductor del camión en un primer momento, registrando el vehículo de arriba a abajo sin encontrar nada en su interior. Esto lleva a los agentes a pensar en que todo lo ocurrido en esa carretera fue un accidente.