La comunicación del Gobierno que ha colaborado en la salida del opositor venezolano Edmundo González del país latinoamericano para recibir asilo político en España ha generado un nuevo choque político entre el Partido Popular y el PSOE.
Los 'populares' habían instado al Gobierno en varias ocasiones a que se posicionase y actuara ante la situación en Venezuela, especialmente mostrando apoyo a González Urrutia, pero no han acabado conformes con la decisión de ayudarle a salir del país.
El vicesecretario de Institucional del PP, Esteban González Pons, ha señalado que se debería haber reconocido al opositor como presidente electo antes de sacarlo de Venezuela: "Sacar a Edmundo González sin reconocerlo presidente legítimo no es hacerle un favor a la democracia, sino quitarle un problema a la dictadura".
Una línea que concuerda con otra publicación, en este caso la de Cayetana Álvarez de Toledo: "El Gobierno se cuelga medallas por traer a España al hombre equivocado. No es al presidente electo de Venezuela al que debieron poner un puente de plata, sino al usurpador criminal".
Por otro lado, el Gobierno sigue defendiendo que necesita verificar las actas para emitir un juicio, como ha señalado el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, cuando ha comunicado esta madrugada el traslado de Edmundo González a petición del venezolano: "Reiteramos la exigencia de que se presenten las actas, de que se puedan verificar. España va a estar siempre ahí para conseguir una salida que tiene que ser pacífica y genuinamente venezolana entre venezolanos".