Tras unas semanas de bloqueo en el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para nombrar a dos magistrados del Tribunal Constitucional (TC), varios vocales de los bloques progresista y conservador del órgano de gobierno de los jueces se han reunido este viernes para intentar acercar posturas.

Ha sido un encuentro por videoconferencia en el que los interlocutores designados por los dos sectores -Álvaro Cuesta, Roser Bach y Rafael Mozo, del progresista; y José Antonio Ballesteros y Carmen Llombart, del conservador-, han conseguido consensuar los requisitos básicos para la lección de los dos magistrados que le corresponde seleccionar al Poder Judicial para renovar el Tribunal de Garantías, según informa Alfonso Pérez Medina.

Una tarea que el Consejo debería haber culminado hace tres días, cuando vencía el plazo fijado por la ley, si bien se dio por hecho que aquello no ocurriría toda vez que el pleno convocado para ello la semana pasada se limitó a fijar las normas para la elección de los jueces.

Según ha sabido laSexta, los cuatro negociadores se han emplazado a una nueva reunión para el miércoles a las nueve y media de la mañana, toda vez que ya han acordado que los futuros escogidos deberán serlo "por amplia mayoría" y "tras una minuciosa evaluación de sus currículos". La parte progresista, según han anunciado en un comunicado los negociadores conservadores, se ha comprometido a "remitir una lista de nueve candidatos ordenada alfabéticamente".

El sector progresista va a proponer a nueve magistrados del Tribunal Supremo: Pablo Lucas, Isabel Perelló, Ángeles Huet, José Manuel Bandrés, Rosa Birulés, Eduardo Espín, Jacobo Barja de Quiroja, presidente de la Sala Militar; y la presidenta de la Sala Social, María Luisa Segoviano, primera mujer en presidir una sala del Supremo. Además, van a incluir a un exvocal del CGPJ ya jubilado, que es conservador: Rafael Fernández Valverde. Un movimiento con el que quieren demostrar que sí hay candidatos conservadores al Constitucional.

Esto es así porque los conservadores no han presentado una lista de nombres alegando que no hay magistrados del Supremo que se hayan manifestado dispuestos a ocupar ese cargo en el Constitucional, cosa que rechazan desde la parte progresista con la presentación de esos nueve nombres.

El acuerdo adoptado en el pleno del pasado jueves establecía que la convocatoria del pleno para nombrar a dos nuevos magistrados del TC "tendrá lugar cuando lo acuerde el presidente por propia iniciativa o lo soliciten al menos cinco vocales" y la misma "incluirá los nombres de dos candidatos".

Para ser designados serán precisos, al menos, 12 votos teniendo en cuenta el quórum actual del Consejo, con dos vocales menos. Esos dos nombres que elija el CGPJ se sumarán a otros dos que debe designar el Gobierno, que ya ha dejado claro que esperará a que los vocales "hagan su trabajo", es decir, a que lleguen a un acuerdo.

Todo ello en medio de una crisis institucional a cuenta de la falta de renovación del propio CGPJ, que pronto cumplirá los cuatro años en funciones y cuyo presidente, Carlos Lesmes, ha llegado a amenazar con dimitir si PP y PSOE no se sientan a negociar de una vez por todas, al tiempo que la Comisión Europea urge a acabar con la interinidad del órgano ante una situación "desesperada".