La Generalitat de Cataluña ultima el protocolo para la vuelta a las aulas el curso que viene. Salud y Educación han acordado la realización de PCR en 24 horas a todos los alumnos de un grupo estable de convivencia en caso de que se produzca un caso positivo de coronavirus y estudian el cierre de los centros en caso de que se produzcan dos positivos en grupos distintos.

En concreto, el protocolo, elaborado entre los departamentos de Salud y Educación, con la colaboración de la Sociedad Catalana de Pediatría y distintos expertos, establece que cada centro tendrá un Centro de Atención Primaria de referencia, así como una enfermera de dicho ambulatorio para resolver dudas, y los directores de los centros recibirán una formación específica.

Aislamiento y aviso a los padres

En el caso en el que el profesorado o la dirección del centro detecte síntomas en en un menor compatibles con coronavirus, se le aislará con mascarilla en un despacho o aula habilitada bien ventilada y se procederá a dar aviso a los padres para que acudan a recogerlo.

Realización de la PCR

La familia deberá regresar a su domicilio y desde allí llamar a su centro de atención primaria de referencia, cuyos facultativos serán los encargados de valorar si realizar una prueba PCR.

Control de los contactos

En caso de hacerla y que el resultado sea positivo se aislará al menor y a sus contactos estrechos familiares así como a los alumnos de su grupo estable de convivencia y se les realizará las pruebas PCR tanto a los menores como al profesorado habitual en un plazo que esperan sea inferior a 24 horas.

Vuelta en 72 horas desde la remisión de los síntomas

Aunque estos contactos estrechos de un contagiado den negativo en el test PCR, deberán mantener el aislamiento durante los 14 días. Mientras que el retorno al centro educativo de un caso confirmado de COVID-19 se hará una vez pasen al menos 72 horas desde la resolución de los síntomas -y siempre y cuando la persona no haya requerido ingreso hospitalario-, haya sido atendido por la atención primaria y haya sido aislada en el domicilio durante el menos 10 días. Para volver al centro no será necesaria la realización de una PCR de control.

Igualmente, las Consellerias estudiarán el cierre de los centros educativos a partir de la aparición de dos contagios en dos grupos de convivencia separados. En el caso de que los centros educativos tengan distintos edificios y los contagios se concentraran en solo uno de ellos, el cierre sería solo del bloque en cuestión.

Dudas entre los padres

La directora de la federación de AMPAS de Cataluña, Lidón Gassul, ha asegurado en Al Rojo Vivo que acatan el protocolo pero ha manifestado que continúan con dudas en su aplicación.

Gassul ha señalado que no les preocupa tanto el protocolo de detección de casos como que no se hayan tomado las medidas necesarias para minimizar el riesgo en los colegios y que en consecuencia haya muchos confinamientos y muchos niños y niñas en sus casas con la problemática que eso conlleva.

También ven difícil que los grupos de referencia estables sean estancos y que los niños lleven la mascarillas en los lugares comunes como en la entrada y salidas, patios, comedores o bibliotecas porque las ratios continuan siendo muy elevadas

El País Vasco establece tres escenarios

El Gobierno Vasco, ha creado tres escenarios, el primero, de normalidad, en el que las clases serán presenciales, algo que han asegurado es prioritario, especialmente en infantil y primaria.

Si los contagios en el municipio o alrededores crecen mucho, pasarán a un escenario 2 en el que tendrán también clases online. Solo si se confina a la población, las aulas serán virtuales. Eso sí, los colegios deben hacer posible que los alumnos que se contagien puedan seguir online las clases presenciales de sus compañeros desde casa.

El protocolo vasco también prohíbe los juegos de contacto en el recreo.

Valencia se centra en los ratios

Mientras que en la Comunidad Valenciana, la estrategia de la Generalitar se centra en los ratios: reducirá a 20 alumnos como máximo por aula de infantil a sexto de primaria.

Además establece que los pupitres estén a metro y medio de distancia. Ante la previsible falta de espacio para cumplir con estos requisitos, autorizan la instalación de barracones y aulas prefabricadas.

El protocolo valenciano también establece que siempre que se pueda, se prioricen las clases al aire libre. Y asegura que trabajarán para crear rutas seguras y aparcabicis para que los alumnos vayan al colegio andando o en bicicleta.