En el discurso de investidura ante el pleno de la Cámara, Carles Puigdemont ha destacado que "será un trabajo que pedirá la participación de mucha gente, entre la cual cuento con el presidente Mas. No es un proyecto de políticos. No lo es siquiera de las instituciones. Es un proyecto coral, colectivo, de la gente".

Puigdemont ha desarrollado su idea de hacienda propia: darle un marco legal; reforzar la estructura, el personal y el material; y "concretar mecanismos" para poner en marcha organismos, como un consejo fiscal, un instituto de estudios tributarios y una aduana de Catalunya.

También ha abordado la seguridad social catalana, que ha asegurado que en el futuro debe asumir todas las prestaciones propias de un Estado, como las pensiones y el subsidio por desempleo; y del Banco Central ha expuesto que dará "credibilidad" al sistema financiero protegiendo a empresas y a ciudadanos.