Una afectuosa caricia en la mejilla. Es el cariñoso gesto con el que Yolanda Díaz ha saludado a Pedro Sánchez a su llegada a la cumbre hispano-portuguesa celebrada este jueves en Trujillo, Cáceres.

Un detalle, que recogen las imágenes del acto distribuidas por Moncloa, que no ha pasado en absoluto inadvertido, especialmente tras las últimas desavenencias surgidas en el seno del Gobierno de coalición por la cuestión de la reforma laboral.

Ha ocurrido en el momento en que Sánchez y el primer ministro portugués, António Costa, saludaban a sus respectivas delegaciones. Por protocolo, las dos protagonistas de la polémica sobre la reforma laboral, Nadia Calviño y Yolanda Díaz, han esperado juntas la llegada de ambos jefes de Gobierno y han sido las primeras en ser saludadas por ellos.

En ese momento, al situarse Sánchez a la altura de Díaz, la vicepresidenta segunda se ha llevado la mano al pecho y ha acariciado el rostro del presidente del Gobierno.

Aunque en este tipo de cumbres habitualmente los periodistas pueden ver en directo esos saludos, en esta ocasión han sido a puerta cerrada y con cobertura oficial. También en este contexto ha llamado la atención otra imagen: la de Díaz y Calviño caminando juntas, después de que ambas se situaran en el centro de la controversia y desde Unidas Podemos acusaran a la vicepresidenta primera de "injerencia" en las funciones del Ministerio de Trabajo que dirige Díaz.

Estas imágenes, que visibilizan una rebaja de la tensión entre los socios y que ha hecho públicas el propio Ejecutivo, son las primeras de ambas vicepresidentas juntas, y junto a Sánchez, tras estallar la semana pasada esta crisis interna, que PSOE y Unida sPodemos lograban encauzar este miércoles con un acuerdo para mejorar la coordinación.