El ministro de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación en funciones, Josep Borrell, considera que "no es imprescindible" un Ejecutivo de coalición para que el PSOE y Unidas Podemos puedan acordar un programa de gobierno, y cree que "no parece imposible" una opción similar a la que existe en Portugal, es decir, un Gobierno socialista "apoyado desde los escaños por Podemos".

En una entrevista en TVE, Borrell ha señalado que "no es ningún secreto" que el líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, quiere un Gobierno de coalición, y tampoco lo es que esa vía "no despierta especial entusiasmo" en el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, a la luz de sus propias declaraciones.

A su modo de ver, es posible pactar un programa de gobierno para que lo ejecute un gabinete socialista, como hizo la izquierda portuguesa tras las elecciones de 2015, una experiencia que considera "extraordinariamente relevante" porque ha servido para hacer "grandes cosas".

Borrell ha aprovechado para afear, veladamente, a Pablo Iglesias su decisión de no apoyar a Pedro Sánchez a principios de 2016, precisamente en las mismas fechas en las que Costa comenzaba su pacto en Lisboa con el Partido Comunista y el Bloco de Esquerda.

"Siempre me pregunté, si Pablo Iglesias hubiera sido portugués, si en su día mi amigo Costa hubiera podido hacer lo que ha hecho", ha dicho. Eso sí, cree que ahora "parece que las actitudes han cambiado" y, por eso, no ve imposible la posibilidad de un Gobierno del PSOE apoyado desde el Congreso por Podemos.

Con todo, Borrell ha afirmado que él no está siguiendo de cerca las negociaciones para formar Gobierno y ha evitado pronunciarse sobre si los presidentes de PP y Ciudadanos, Pablo Casado y Albert Rivera, están pugnando por liderar la derecha. Sin embargo, sí ha defendido a Sánchez de quienes le critican por convocar una ronda de contactos en el Palacio de la Moncloa por considerar que esa es la tarea del Rey.

Para el ministro en funciones, en realidad son tareas "complementarias" y es normal que Sánchez hable con los demás grupos para ver qué capacidad tiene para formar Gobierno, porque cuando el Rey le llame a consultas y le pregunte qué apoyos tiene "lo normal" es que ya pueda comunicárselos.

En su opinión, en las elecciones del 28 de abril España ha pasado "bien" lo que era "una prueba existencial" porque si PP, Ciudadanos y Vox hubieran podido formar Gobierno él cree que la vida política española sería "radicalmente distinta", habría más conflictividad política y se pondrían en cuestión algunas de las reformas crecientes desde el punto de vista de los derechos civiles. "Eso se ha evitado y es una muy buena noticia", ha resumido.