El extesorero del PP Luis Bárcenas ha decidido desplegar toda su artillería contra su antiguo partido a cinco días de que arranque el juicio por la Caja B de esta formación. En un escrito a la Fiscalía Anticorrupción, según ha podido saber laSexta, el exsenador popular ha confesado que Rajoy era plenamente consciente de los pagos ilícitos a cambio de contratos públicos. También insiste en que era receptor de sobresueldos.

"De todas estas actuaciones era perfecto conocedor don Mariano Rajoy, hasta el punto que a principios del 2009, tuvimos una reunión en su despacho, en el que le mostré los papeles de esta contabilidad B espetándome que cómo podía seguir conservando toda esta documentación comprometedora, que terminó, personalmente, destruyéndola en la máquina destructora de papeles, sin saber, que yo guardaba copia de esta documentación, gran parte de la cual me ha sido sustraída del estudio de mi mujer cuando entraron a robar en el mismo", dice el escrito, al que ha tenido acceso esta cadena.

En el escrito, Bárcenas señala que algunas de las donaciones recibidas por el PP eran a cambio de contratos públicos y que los populares se financiaron ilegalmente desde 1982 hasta 2009: "He de decir, que desde el año 1982 (...) existió institucionalizado un sistema de financiación del Partido Popular con percepciones en B que se realizaban a través de donativos (...) siendo ya: Presidente, D. Mariano Rajoy: Secretario General, el Sr. Acebes; y tesorero, D. Álvaro de Lapuerta".

El documento confirma la voluntad del exsenador de "colaborar" con esta y otras piezas relacionadas y que afectan al Partido Popular.

Según fuentes de este partido consultadas por laSexta, en el PP no preocupan estas informaciones e insisten en que el compromiso del actual presidente Pablo Casado es con la ejemplaridad.

La primera reacción por parte del Gobierno ha venido del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, a través de Twitter, donde ha relacionado la confesión de Bárcenas con el bloqueo por parte del PP del Poder Judicial: "¿Por qué el PP está tan empeñado en controlar el Consejo General del Poder Judicial bloqueando indefinidamente su renovación? Bárcenas os lo explica", dice, y enlaza a una información al respecto.

Las razones

En el documento, Bárcenas asegura sentirse engañado con las promesas de la formación de la que fue extesorero: le aseguraron que su esposa, Rosalía Iglesias, nunca entraría en prisión. Algo que ha sucedido: fue condenada a trece años de prisión por la trama Gürtel a finales del año pasado. Bárcenas reconoce su "ingenuidad" por creerse dicha propuesta, lo que le hizo "firmar la paz" con el partido.

"De ahí que firmara -podíamos llamar- 'la paz' con dicho partido político, retirando la denuncia que había interpuesto por la destrucción de la información contenida en ordenadores de mi disposición personal o de mis pretensiones laborales en la jurisdicción laboral a consecuencia de mi salida del Partido Popular", explica el documento.

El extesorero asegura después que la razón de que colabore ahora, además del ingreso en prisión de su mujer, ha sido el "desalentador" conocimiento de la trama 'Kitchen', que investiga el uso de fondos reservados por parte del Gobierno del PP para seguir y hacer vigilancias ilegales a Bárcenas. Aunque también el tiempo en prisión le ha hecho reflexionar: "Llevo privado de libertad casi cuatro años y medio, y esta situación hace que uno piense en los errores que he podido cometer en la vida, el mal que he podido inferir a la sociedad fruto de una España en la que todo valía".

Así recibían el dinero

Sobre el sistema de donativos, Bárcenas detalla que se hacían "en metálico" y directamente a Álvaro de Lapuerta, "persona de máxima confianza del partido" y designado de hablar con los ministros responsables de adjudicaciones de obra pública para que la concesión fuera a estos donantes.

Los sobresueldos, que en su escrito denomina "complementos salariales", los recibieron el expresidente del PP y del Gobierno, Mariano Rajoy; la exsecretaria general y exministra de Defensa, Dolores de Cospedal; el exministro Federico Trillo; el expresidente del Senado, Pío García Escudero o el exvicepresidente Francisco Álvarez Cascos, entre otros.

"Estas entregas eran realizadas, personalmente, por don Álvaro -y en ocasiones por mí-, con mi conocimiento, por cuanto me daba instrucciones de sacar el metálico de la caja fuerte situada en mi despacho, con una periodicidad que dependía de la liquidez de la caja diversa, de manera que las introducía en un sobre en el que ponía el nombre correspondiente", explica el extesorero.