El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha admitido a trámite la primera querella interpuesta a raíz del escándalo de Banco Madrid, dirigida contra la propia entidad y sus antiguos responsables por un delito de blanqueo de capitales.

Se trata de la querella que presentaron a principios de abril las mercantiles y clientes de la entidad Marine Instruments y Liunaski contra Banco Madrid y su expresidente José Pérez; el exconsejero delegado Joan Pau Miquel -en prisión en Andorra-; los hermanos y dueños de BPA Higini y Ramón Cierco; Soledad Núñez y Ricard Climent y el exsecretario del Consejo Rodrigo Achirica.

Andreu reproduce los hechos descritos en el escrito, en el que se recogían los motivos por los que el Banco de España decidió intervenir esta entidad el pasado 10 de marzo, lo que provocó la dimisión en bloque de los consejeros querellados, al tiempo que el supervisor andorrano hacía lo propio con su matriz, acusada por Estados Unidos de ayudar a lavar dinero del crimen organizado.

Para el juez, estos hechos deben ser objeto de investigación penal en la Audiencia Nacional, ya que la hipótesis de la querella no se advierte "ni absurda ni irracional, desde el momento en que consta entre la documentación aportada el acuerdo del Banco de España de intervención de Banco Madrid" después de que el Instituto Nacional Andorrano de Finanzas decidiera intervenir BPA. Una decisión que, según explica Andreu, se basó en asegurar el cumplimiento por parte de BPA de la normativa en materia de blanqueo de capitales.