Cinco de los concejos más turísticos del Oriente de Asturias, Llanes, Cangas de Onís, Ribadesella, Cabrales y Parres, se encuentran desde este miércoles en "alerta naranja" por el incremento de casos y brotes detectados en sus límites, muy por encima de la media del Principado.

Con esta declaración se potenciarán las labores de vigilancia, control y detección precoz de casos positivos, se intensificarán las mensajes de prevención y las medidas que ya hay en marcha en toda la comunidad, como la limitación de reuniones a un máximo de diez personas o la anulación de eventos que puedan suponer un riesgo para la población, según ha anunciado el director general de Salud Pública, Rafael Cofiño.

Tras reunirse con los alcaldes de la zona, las autoridades sanitarias harán también un mayor control de "puntos calientes" en los que puedan darse situaciones o reuniones no controladas, y se va a extremar la vigilancia epidemiológica en la zona para evitar un incremento no deseado o tener que llegar a cierres perimetrales o confinamientos de algunas localidades.

Aunque las medidas "no van a suponer ningún cambio" para los más de 32.000 habitantes de los cinco municipios afectados respecto a las actualmente están en vigor en toda la comunidad, Cofiño ha incidido en que el objetivo es evitar tener que pasar "a un escenario diferente" en que hubiera que tomar "medidas más drásticas y restrictivas" como cierres perimetrales o confinamientos.

Con esta "alerta naranja" se busca además intensificar la colaboración con los ayuntamientos y la Delegación del Gobierno para que ayuden a "reevaluar" algunas actividades que se están realizando y que "quizá haya que realizar de otra manera" dado que la mayoría de los casos están relacionados con establecimientos hosteleros, comerciales, deportivos o cámpings.

"Espacios seguros"

En un contexto de incremento de la población de la zona derivada de la época estival, muchos de los casos tienen vínculos entre ellos y extienden la epidemia entre los distintos concejos, ha apuntado, tras considerar que "el semáforo" puesto a esos cinco municipios no tiene por qué tener un efecto negativo sobre el turismo sino que incluso puede ser "beneficioso" dado que se trata de generar "espacios seguros" en todos los ámbitos.

Según el coordinador del Observatorio de la Salud, Mario Margolles, en el área sanitaria VI del Principado, de la que forman parte dichos concejos, se han detectado en agosto 36 nuevos casos de covid-19 lo que sitúa la tasa de incidencia en ese territorio en 64 por cada cien mil habitantes, una cifra que prácticamente duplica la del conjunto de Asturias.

Además, en dicha área se han declarado cuatro brotes -en Cabrales, Parres, Ribadesella y Llanes- que suman hasta diez afectados en algunos casos y que van incrementándose progresivamente a medida que se controla a más contactos.