La titular del Juzgado de Instrucción nº 2 de Oviedo ha propuesto juzgar al exvicepresidente del Gobierno con el PP y expresidente de Asturias, Francisco Álvarez-Cascos, por un presunto delito de apropiación indebida de fondos de su partido Foro Asturias (FAC), al que habría cargado más de 5.000 euros en habitaciones de hotel, videojuegos o entradas para museos.

La jueza sigue así el criterio de la Fiscalía, que en su informe cuantificó que, entre el 15 de mayo de 2011 y el 16 de octubre de 2017, Álvarez-Cascos se valió de su cargo como presidente y secretario general del partido que fundó tras abandonar el PP y del insuficiente sistema de control de gastos en la formación para cargar facturas de hoteles, viajes, comidas o videojuegos.

En un auto al que ha tenido acceso laSexta, la jueza considera que "ostentando, presuntamente, el Sr. Álvarez-Cascos Fernández un absoluto control de la actividad y de las decisiones del partido y valiéndose de su cargo orgánico dentro del partido para disponer de los fondos y recursos económicos titularidad de Foro para fines ajenos a la actividad política, tratándose de gastos de carácter personal".

Continúa la magistrado que llegó, presuntamente, entre el periodo entre el 15/05/2011 y el 16/10/17 -y sirviéndose de su condición de Presidente y posteriormente de Secretario General y de la inexistencia de un insuficiente sistema de control de gastos en el partido Foro Ciudadanos- "a cargar a las cuentas del partido gastos de naturaleza personal no relacionados con su actividad política y por ende desvinculados de la actividad y del interés del partido".

Las justificaciones del investigado también parecían insuficientes, a juicio de la Fiscalía, y aunque inicialmente se le imputaron gastos más elevados, siguen sin ser "lógicos, aceptables e ínsitos a la actividad política". La querella de Foro, realizada tras una auditoría externa, imputaba a Álvarez-Cascos la comisión de gastos injustificados a su nombre y de su familia estimados en 1,2 millones.

En un informe del pasado 9 de febrero, el Ministerio Fiscal concluyó que había gastos que sí podían considerarse justificados por la actividad profesional de Álvarez-Cascos. Entre ellas, el cobro de su salario, de conferencias, los gastos de conductor, vehículo, secretaría personal, préstamo personal recibido (y devuelto), alquiler de un centro de negocios en Madrid para el partido o numerosos gastos que aparentemente se podían clasificar como de carácter personal pero que aparecían relacionados con su actividad política.

Estos son los gastos que la Fiscalía cree indebidos:

  • Gastos de procurador por un asunto político previo relacionado con otro partido político y procurador por un asunto personal.
  • Psicotécnico.
  • Zapatos.
  • Gastos de cuatro desplazamientos a la localidad de A Coruña y gastos de hotel y alimentación.
  • Hotel de su suegro.
  • Pedidos de comida a domicilio particular y a nombre de familiares.
  • Juego de videoconsola.
  • Cuatro billetes de tren AVE de sus hijos.
  • Cinco entradas para la Copa Davis, dos entradas para el Museo Thyssen y dos entradas para el Museo del Prado.
  • Cama completa, compuesta por colchón, patas y canapé.
  • Gastos de restaurantes en localidades de veraneo y hamburgueserías.

Tras su salida del Partido Popular en 2011, Álvarez-Cascos impulsó Foro Asturias Ciudadanos, con el que ese mismo año ganó las elecciones autonómicas y alcanzó la presidencia del Principado.

Álvarez-Cascos, que perdió el gobierno autonómico en favor del PSOE tras adelantar las elecciones a marzo de 2012, se mantuvo al frente de esta formación hasta 2018, primero como presidente y luego como secretario general, hasta que tomó las riendas Carmen Moriyón, exalcaldesa de Gijón, con la que después mantuvo un enfrentamiento por el control del partido.

La actual dirección de Foro decidió denunciar a Álvarez-Cascos por los delitos continuados de apropiación indebida y administración desleal tras realizar una auditoría externa, a la vez que acordó su expulsión del partido en junio de 2020.

En su primer comparecencia judicial el pasado mes de septiembre tras la ratificación de la querella, el fundador de Foro aseguró que todas las imputaciones eran "ridículamente falsas" y atribuyó las acusaciones a la división interna.