La localidad de Antas de Ulla, en Lugo, tampoco ha sido ajena a los supuestos casos de corrupción. O eso es lo que denuncia la oposición, ya que según Pilar García, portavoz del PSOE, el alcalde popular Javier Varela ha consolidado cuatro puestos de funcionario cuando en la orden del día sólo se recogía uno.
Sin embargo, el caso toma otro color cuando se informa de que las nuevas plazas van a ser ocupadas por la esposa de Varela, la mujer de un edil popular del pueblo, un allegado al partido y, por último, una para el propio alcalde. Pilar García asegura ante las cámaras de laSexta cómo fue el suceso: "En la orden del día se funcionalizaba una plaza, pero cuando llegamos al pleno nos encontramos con que eran cuatro".
"El alcalde y su esposa, cuando el regidor era el padre del actual, entraron a trabajar en el Ayuntamiento como personal laboral contratado", explica García. "Ahora lo que han hecho ha sido consolidar su plaza como personal laboral funcionario", sentencia la portavoz socialista de Antas.
Mientras, el alcalde se excusa diciendo que la nueva ley de régimen local le obliga a convertir esas plazas en puestos de funcionarios.