El ministro de Exteriores, José Manuel Albares, no ha querido comentar si ha tratado con su homólogo marroquí, Naser Burita, sobre el espionaje a Pedro Sánchez, a la ministra de Defensa y el titular de Interior con 'Pegasus', repitiendo en hasta tres ocasiones que las relaciones internacionales y bilaterales "se basan en hechos, no en conjeturas ni hipótesis" ante los señalamientos de que Marruecos podría estar detrás.

Así se ha expresado Albares poco después de que España y Marruecos hayan acordado este miércolesla reapertura de la frontera terrestre de Ceuta y Melilla "en los próximos días". En concreto, el ministro ha aclarado que será el Ministerio del Interior el que desvele la "fecha exacta" porque tras la "decisión política" que ya se ha tomado ahora queda ultimar los detalles y los aspectos operativos de la misma. Con todo, ha dejado claro que "el acuerdo ya es definitivo y se producirá la apertura por esos pasos y esas aduanas en los muy próximos días".

Marruecos se encuentra en el punto de mira de la opinión pública española dado que la información hecha pública hasta ahora por el escándalo del espionaje confirma que los móviles del presidente de Sánchez, de Robles y de Marlaskafueron infectados con Pegasus entre mayo y junio de 2021, justo cuando España enfrentaba una crisis diplomática casi sin precedentes con Rabat por la llegada de Brahim Gali, líder del Frente Polisario, a nuestro país y por la situación del sáhara occidental.

Una crisis que desenvocó en la entrada masiva de miles de migrantes en España a través de Ceuta ante la inacción e incluso la ausencia de los agentes fronterizos marroquíes. Por el momento, tampoco desde el Gobierno se ha querido ofrecer más impresiones de este asunto más allá de detallar cómo y cuándo se produjo ese espionaje, así como la cantidad de datos revisados con ese polémico software.

Sin embargo, las sospechas sobre Marruecos han ido ampliándose después del anuncio del Gobierno al conocerse, unos días más tarde, que más de 200 números móviles de españoles fueron elegidos como posibles objetivos de vigilancia a través del software 'Pegasus'. En esta información, que publicaba el medio británico 'The Guardian', se recogía la idea de que el cliente que hizo esta selección pudo ser Marruecos.

"El cliente aparentemente estuvo activo en la búsqueda de posibles objetivos para la vigilancia dentro de España", se detallaba en esa noticia, que hace referencia a un informe filtrado de la plataforma Forbidden Stories. Sin embargo, esto no implica que en España se infectara a centenares de móviles, pero sí que se seleccionaron en 2019 como posibles objetivos para vigilar y espiar con 'Pegasus', junto con otros 50.000 terminales de todo el mundo.