El ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, ha analizado la situación en Oriente Próximo tras los últimos ataques entre Israel y Hizbulá. El ministro ha señalado que nos encontramos en un momento de "tensión máxima", advirtiendo de que la extensión del conflicto al Líbano podría provocar una "guerra regional" con "connotaciones muy graves".
Unas declaraciones que ha realizado después de que Israel haya declarado el estado de emergencia militar tras haber bombardeado instalaciones del partido-milicia chií libanés Hizbulá, alegando que el grupo estaría preparando un gran asalto en territorio israelí.
Albares ha asegurado, en una entrevista en 'Cadena Ser', que la extensión de este conflicto es algo que "puede evitarse", destacando que lo importante es que se produzca un "alto al fuego" en Gaza, algo que todavía parece estar lejos de que vaya a producirse, y es que Hamás ha rechazado la última propuesta de Israel para alcanzar un alto el fuego en la Franja.
El ministro ha señalado que otra de las situaciones que deben darse para que la tensión no siga aumentando y extendiéndose, es que entre "ayuda humanitaria sin ningún obstáculo". "Tenemos que establecer un marco en el que se pueda producir un diálogo entre israelíes y palestinos", ha señalado.
De esta forma, ha defendido que al final lo que tiene que haber es "un Estado palestino que conviva en buena vecindad con el Estado israelí".
El ministro ha asegurado España no cejará en ese objetivo, indicando que "muchos socios europeos" coinciden en que "algún día llegará la paz". "Nosotros no podemos resignarnos por justicia, por estabilidad internacional y por humanidad, a que la guerra sea la forma natural de relacionarse entre los distintos pueblos de Oriente Medio", ha destacado.
Además, ha analizado el papel de Estados Unidos, Qatar y Egipto como mediadores del conflicto, recalcando que "todos sabemos cuál es la fórmula". "Lo que falta ahora es voluntad y valentía política para aplicarla", ha zanjado.