Ocho de cada diez personas que desarrollaron formas graves de COVID-19 tenían obesidad. Así lo arroja un estudio que relaciona la obesidad como uno de los principales factores de riesgo para experimentar complicaciones por el coronavirus.

Factores que van mucho más allá de la edad y que ahora, según un estudio del Centro de Investigación Biomédia en Red de Epidemiología (CIBERESP), se relacionan aún más con esta patología. Ujué Fresán, primera autora e investigadora del Instituto de Salud Pública y Laboral de Navarra (ISPLN) y CIBERESP, nos cuenta que, en jóvenes, la obesidad mórbida multiplica por cinco el riesgo de ser hospitalizado.

El motivo podría ser el estado proinflamatorio del sistema inmune que produce esta patología y que influye en la capacidad de respuesta ante cualquier enfermedad. En laSexta también hablamos con Francisco Tinahones, presidente de la Sociedad Española de Obesidad (SEEDO), que asegura que "un porcentaje muy alto" de las muertes por COVID tienen que ver con el exceso de peso.

Aunque en nuestro país, un 60% de la población adulta tiene sobrepeso, solo un 21% reúne criterios de obesidad. "La obesidad no es un problema estético. Es una enfermedad que ocasiona una enorme cantidad de complicaciones", añade Tinahones.

Además, estamos en peor forma física. Casi la mitad de los españoles, el 44,3%, han aumentado su peso medio desde marzo de 2020. El 73% de los entrevistados sitúa ese rango entre 1 y 3 kilos de media. Un peso que todavía no hemos perdido. Y eso, es debido en parte, al descenso de la actividad física.

Casi la mitad de los encuestados afirma que hizo menos ejercicio durante 2020. Una tendencia que, por el contrario, este 2021 va en alza. Algo que se nota en los gimnasios y en la calle. Precisamente, los centros deportivos confirma el ascenso tras la crisis; en total, son 770 centros deportivos lo que se han adscrito en nuestro país desde antes de la pandemia.