El presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, anunció una amnistía para alrededor de 2.000 presos para descongestionar el sistema penitenciario e intentar mitigar la escasez de comida en las cárceles por la falta de fondos.
"Las 46 cárceles del país están superpobladas. Tienen una capacidad para 17.000 presos, pero han estado acogiendo a más de 19.000 reclusos", justificó la portavoz del Servicio Correccional y de Prisiones de Zimbabue, Priscilla Mthembo.
Entre los amnistiados hay 139 mujeres y unos 200 hombres que cumplían condena en la prisión de máxima seguridad de Chikurubi, en las afueras de la capital del país, Harare.
Según el decreto presidencial, todos los presos juveniles han sido amnistiados independientemente de la gravedad de sus crímenes, mientras que los reclusos varones solo han sido liberados si no cumplían condena por delitos de sangre o violación.
Todos los presos que cumplían cadena perpetúa y cuya pena fue impuesta antes del 25 de diciembre de 1995 también han sido perdonados.