En Zytomir, al noroeste de Ucrania, las alarmas antiaéreas suenan casi cada hora. Eduard pasea con un equipo de laSexta cuando arrancan de nuevo. Mira al cielo y calma a su mascota. No es el primer bombardeo que sufre esta zona: las tropas rusas han apuntado directamente a las viviendas de la población civil.

El ataque destruyó el barrio de Eduard y en él han muerto tres vecinas. Su casa sigue en pie y él lo fía todo a su fe. Nos enseña el talismán que le protege y chapurrea algo de español. Trabaja como soldador varios meses al año en Girona, donde espera volver cunado acabe la guerra para ganar dinero y reconstruir su casa.

En el vecindario también vive Igor, que se calienta gracias a los fogones de su cocina. Su zona también ha sido devastada. Y si está vivo es gracias a su gato, nos cuenta. "Estaba sentado en el sofá y el gato saltó. Se tumbó en el suelo y yo me tumbé con él y comenzó el bombardeo", explica.

La ciudad trata de seguir adelante. Mientras, en el cementerio, los soldados fallecidos reciben una precaria pero sentida sepultura.