Los bombardeos rusos siguen destruyendo Járkov, la segunda ciudad más importante de Ucrania, constantemente asediada. Allí, los ataques de Moscú sorprendían este domingo a los sanitarios que intentaban socorrer a los heridos, tal y como puede verse en el vídeo que ilustra estas líneas.

Las imágenes muestran cómo cuatro sanitarios atienden a la víctima de un bombardeo, cuando nuevas bombas empiezan a caer sobre la ciudad. Todos huyen a buscar refugio, menos uno de los sanitarios, que permanece junto a la mujer mayor, que se protege con un bolso.

También el cámara que graba la escena resiste sin refugiarse: los tres se quedan bajo las bombas. Los propios soldados ucranianos también buscan cobijo, mientras al lado del sanitario y la mujer, otro herido permanece tendido en el suelo.

El asedio a Járkov no cesa y solo en las últimas 24 horas las tropas del Kremlin han perpetrado 24 ataques contra la ciudad. Allí, el fuego contra un barrio residencial ha dejado este domingo al menos cinco fallecidos y 11 personas heridas. Ello, después de que la víspera otro ataque redujera un centro comercial a escombros y alcanzara a varias personas.

El panorama es desolador en segunda ciudad más grande de Ucrania, donde antes de la guerra vivían 1,4 millones de personas, muchas de las cuales se han ido o se ven resignadas a vivir bajo tierra, en el metro.

En la superficie, se arriesgan a que les ocurra lo mismo que a la persona que aparece al final del vídeo: que les caiga un proyectil al ir a comprar. Tuvo suerte y pudo seguir por su propio pie, pero no pueden decir lo mismo las 10 personas, entre ellas un bebé, que murieron ese mismo día.