"Los niños se siguen desmayando y no ponen atención, no los entran", afirma una mujer en un vídeo enviado con su móvil para ver la situación en la que se encuentran la caravana de migrantes que trata de llegar a EEUU. "La niña se está muriendo", grita otra mujer.

Quieren que se vean todas las imágenes, no sólo las de los disturbios. Todo ocurrió ese mismo día, cuando la gran caravana, agotada llegaba a la frontera de México con Guatemala.

Llevan dos semanas caminando por México y, dicen, están cansados de tantas críticas. Las condiciones son demasiado duras: "Parece un relajo de basura, pero somos seres humanos acostados en el suelo", cuenta un hombre en otro vídeo.

Más de 500 personas han tirado ya la toalla. Mariana Zaragoza, de la Universidad Politécnica de México afirma que "una mujer embarazada ha dado a luz y otra que tiene sangrados vaginales que no se pueden detener". Los que se quedan ya solo luchan por su propia supervivencia.

Han hecho noche en Oaxaca y este sábado entran en Veracruz. Si salen vivos, lo que les espera en la frontera norte es un centenar de militares que ya están colocando concertinas ante la llegada de lo que su presidente ha calificado como "la gran y violenta amenaza de tez morena". Trump ha negado que haya dicho que los matarán, pero advierte de que serán detenidos durante largo tiempo.