Pretendía disparar su pistola eléctrica, pero se equivocó y disparo su arma de fuego contra un hombre que se resistía a ser detenido tras una infracción de tráfico.
Al menos, es lo que asegura una agente de policía que comparece ante el juez en Kansas, Estados Unidos. La agente implicada es Briendley Blood, y, según recoge 'ABC News', solo llevaba dos meses ejerciendo, por lo que era una auténtica novata.
Durante el forcejeo con el herido, que se negaba a entregar la documentación pertinente tras ser retenido por no llevar el cinturón de seguridad, Blood quiso utilizar su taser para paralizar al infractor, pero confundió su arma.
El hombre ha sobrevivido a este ataque y la agente ha dimitido.