Los tres terroristas
caminan por la calle despacio, Yusef Zaghba, de 22 años, Kuram Butt, de 27 y
Rachid Reduan, de 30. Ya habían matado a ocho personas y buscaban más en un pub, pero
la puerta estaba bloqueada. Entonces apareció una víctima mirando el móvil,
despistado. El terrorista más joven, de 22 años, fue a acuchillarle. Falló,
pero aparecieron sus compañeros y entre todos le tiraron al suelo.
Antes de huir, el mayor
de todos le dio la vuelta para intentar rematarle en el pecho. A pesar de todo,
la víctima sobrevivió. Inmediatamente los policías se les echaron encima. Tardaron
ocho segundos en acabar con los terroristas.
Retrocedemos para
analizar uno a uno lo que hicieron los agentes que llegaron en coche: Primero,
el conductor. Fue el más rápido en salir y fue a por ellos apuntando con la
pistola. Un terrorista se lanzó contra él pero recibió varios disparos y cayó
muerto al suelo.
Volvemos atrás y nos
fijamos ahora en los otros dos policías. Salieron
apuntando con sus subfusiles y acto seguido los otros dos terroristas se tiraron
a por ellos. Derribaron a un agente
pero cuando los atacantes cayeron al suelo, ya estaban muertos. El otro policía
les disparó justo antes de caer.
Mientras llegaban
refuerzos, el agente golpeó con el pie a uno de los terroristas para comprobar
algo. Es cuando descubrieron el falso cinturón de explosivos que llevaban. La Policía dice que sus
agentes dispararon 46 tiros durante todo el ataque.