Salvo el dolor del pinchazo nada será igual a partir de ahora. Por fin, tras años de estudio, se puede decir que el ébola es curable sobre el terreno. "Es una gran noticia, por supuesto, y esta noticia salvará vidas. Ahora tenemos una vacuna que es muy eficaz", ha explicado el portavoz de la OMS.
Un cóctel de medicamentos que ha conseguido reducir el índice de mortalidad del 75% a tan solo el 6%, en aquellos pacientes que han accedido al fármaco en fases tempranas. Nunca antes se ha conseguido este índice de éxito.
Ahora este tratamiento se utilizará, si el gobierno congoleño quiere, a nivel masivo en el país para frenar la segundo brote de ébola más grande de la historia.
Sólo en el último año ha afectado a casi 3.000 personas y ha dejado cerca de 2.000 muertos en la República Democrática del Congo.
Aunque el entusiasmo es comprensible, la comunidad científica avisa: no es una cura definitiva. No obstante, se trata de un gran paso para combatir el ébola que hasta ahora en los países más afectados era una sentencia de muerte.