Bajo una lluvia de fuegos artificiales, ha celebrado el premio al mejor profesor del mundo. Se llama Peter Tabichi, tiene 36 años y es de Kenia.

Ataviado con su hábito de monje franciscano, se abrazó con el presentador, el actor Hugh Jackman y recibió el galardón, valorado en un millón de dólares, de manos del príncipe heredero de Dubai.

Tabichi, con su dedicación, está transformando una de las zonas más pobre de Kenia. Empezó enseñando Física y Matemáticas a 200 alumnos, y ahora tiene cerca de 500. Y no solo en la escuela, también visita a domicilio a los que necesitan refuerzo.

Tabichi dona el 80% de su salario a la comunidad y se asegura de que todos aprenden con el estómago lleno. A los padres les enseña técnicas de cultivo y además saca tiempo para plantar árboles en el Club de la paz y diseñar junto a los escolares innovadores proyectos de ciencias. Su verdadero premio es mejorar las vidas de quienes más lo necesitan.