El ultraderechista Geert Wilders reconoció su derrota en los comicios generales celebrados en Holanda, aunque se declaró "ganador de cuatro escaños más" que en las pasadas elecciones. Finalmente su formación ha logrado 20 de los 150 escaños del Parlamento.
El político neerlandés llegó a exigir "un puesto en la futura coalición" de Gobierno, si bien la mayoría de partidos han descartado durante la campaña incluirlo en un hipotético Ejecutivo.
"Esto es una primavera patriótica. Yo soy un luchador y no un populista. Nuestra influencia es grande", ha añadido el líder del Partido de la Libertad (PVV). Además, si bien ha señalado que prefiere "gobernar", afirma que está "dispuesto a hacer una fuerte oposición" al futuro Ejecutivo de los Países Bajos.
También felicitó a su contrincante, el primer ministro Mark Rutte. Añadió que se esperaba obtener más apoyos pero que "con sus expectativas, el PVV ha perdido".
Rutte celebró en un discurso en La Haya haber derrotado al "populismo equivocado" de Wilders y mostró su deseo de "volver a unir Holanda". En referencia al político ultraderechista, aseguró que este país "sigue siendo proeuropeo".
"En una campaña, es inevitable que salgan a la luz las diferencias, pero ahora es importante unir de nuevo al país y formar un Gobierno estable para los próximos cuatro años", afirmó Rutte.