Y vuela a 1.000 kilómetros por hora
La última demostración de poder de Putin: prueba un misil que puede alcanzar objetivos a 1.000 kilómetros de distancia
Los detalles Con un equipo coordinado y con soldados atentos a cada detalle, Rusia ha lanzado el misil hipersónico en sus maniobras conjuntas con Bielorrusia.

Las autoridades rusas han anunciado este domingo que han lanzado un misil de crucero hipersónico contra un objetivo en el mar de Barents, en el océano Ártico entre Rusia y Noruega, en el marco de las maniobras militares realizadas conjuntamente con Bielorrusia y que tienen lugar en un momento de grandes tensiones por la invasión rusa de Ucrania y la reciente interceptación de drones rusos en el espacio aéreo de otros países, como Polonia.
El Ministerio de Defensa de Rusia ha indicado que durante estas maniobras, denominadas 'Zapad-2025', la "Flota del Norte lanzó un ataque con misiles contra un enemigo simulado" y, para ello, realizó "un disparo práctico de un misil hipersónico Zircon contra un objetivo marítimo".
"Según datos de control objetivo recibidos en tiempo real, el objetivo ha sido destruido por un impacto directo", reza un comunicado de la mencionada cartera ministerial publicado en su canal de Telegram, donde ha agregado que la zona donde se ha realizado el lanzamiento había sido cerrada previamente" al tráfico marítimo y aéreo civil.
Así, con un equipo coordinado y con soldados atentos a cada detalle, Rusia ha probado el misil hipersónico Zircon en sus maniobras conjuntas con Bielorrusia. Se trata de un arma capaz de volar a 10.000 kilómetros por hora, y alcanzar objetivos a 1.000 kilómetros de distancia.
Esto es toda una demostración de poder por parte de Putin, en medio de las tensiones del Kremlin con la OTAN, tras los drones que entraron en Polonia el pasado miércoles.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo que podía ser un accidente, pero su secretario de Defensa afirma lo contrario: "Los drones fueron lanzados intencionadamente".
Reacción de la OTAN
Así, la incursión rusa ha precipitado la respuesta de la OTAN, con el inicio de la operación 'Centinela Oriental' y el despliegue militar de los aliados del organismo internacional en la frontera polaca.
Alemania enviará cuatro cazas Eurofighter, Dinamarca aportará dos cazas F-16 y un sistema antiaéreo, y Francia tres cazas Rafale. Países Bajos, por su parte, ha ofrecido sistemas de defensa aérea, artillería y 300 soldados; y la Republica Checa enviará tres helicópteros Mi‑171 para detectar drones a baja altitud
Además, España y Reino Unidos también se han sumado a la misión, aunque no han especificado todavía los medios que aportarán.
De esta forma, Europa quiere mandar un mensaje de unidad ante las amenazas de Putin, reforzando con soldados, blindados y cazas sus fronteras con Rusia.