Turquía ha pedido a Europa que se haga cargo de sus ciudadanos vinculados al Dáesh. "No somos un hotel", ha expresado Numan Kurtulmuş, ministro turco del Interior. Así, Kurtulmuş ha amenazado con regresar a los prisioneros del Dáesh a sus países de origen.

En este momento, las autoridades están evaluando cómo devolverlos. Y, en esta línea, han afirmado que Reino Unido o Países Bajos han tomado el camino fácil de revocar la ciudadanía a estos acusados.

Justo hace una semana, Trump confirmaba la muerte de Abú Bakr al Baghdadi, líder de Dáesh. "Ha sido la máxima prioridad de seguridad de mi administración", aseguró, añadiendo que las fuerzas de operaciones especiales no sufrieron bajas durante la misión.