El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, cree que sería una "buena idea" añadir su cara a los rostros esculpidos de cuatro mandatarios del país en el monte Rushmore, ubicado en Dakota del Sur.

"Nunca lo he sugerido, aunque en base a todas las cosas conseguidas durante mis primeros tres años y medio, a lo mejor más que ningún Presidente. ¡Suena una buena idea para mí!", ha publicado el mandatario en su cuenta de Twitter.

Junto a estas afirmaciones, Trump ha compartido una noticia de la 'CNN' que se hacía eco de una información publicada por el diario 'The New York Times', que señalaba que un asistente de la Casa Blanca se había puesto en contacto el año pasado con la oficina de la gobernadora de Dakota del Sur, Kristi Noem, para preguntar cuál sería el proceso para añadir la figura de un presidente en Rushmore.

Esta información también recuerda que Trump le había dicho a Noem en 2018 en el Despacho Oval que aspiraba a que su rostro fuera incluido en el monumento.

Para alimentar más la polémica, el mandatario estadounidense ha compartido una foto suya en Rushmore, tomada durante su visita del mes pasado en la víspera del 4 de julio. Entonces pronunció un discurso en el que instigó las divisiones sociales, en medio de la ola de protestas raciales en el país y los ataques a monumentos de presidentes y líderes de la Confederación, entre otros, como símbolos del pasado esclavista de Estados Unidos.

Para miles de indígenas en Estados Unidos, la visita de Trump al monte Rushmore fue un "símbolo del supremacismo blanco" que promueve el mandatario, y la recibieron como un "insulto", en pleno debate nacional sobre los monumentos y el racismo.

En la famosa ladera de Dakota del Sur están esculpidos los rostros de los presidentes George Washington (1789-1797), Thomas Jefferson (1801-1809), Abraham Lincoln (1861-1865) y Theodore Roosevelt (1901-1909).