La Corte Internacional de Justicia de las Naciones Unidas ha decretado medidas cautelares contra Israel para evitar "un genocidio" en la Franja de Gaza. La Haya ha dictado medidas vinculantes que no son de carácter obligatorio para Israel, pero que ejercen presión sobre el Gobierno de Netanyahu y reconocen la denuncia de Sudáfrica al determinar que algunos actos y palabras de dirigentes israelíes podrían avalar la "intención genocida" del Estado sobre Gaza.

El Tribunal ha evitado tomar medidas definitivas sobre la actuación del ejército israelí en Gaza, si bien ha llamado al cumplimiento de varias medidas cautelares que Israel deberá poner en práctica en el plazo de un mes, cuando tendrá que volver a dar cuenta al Tribunal a través de un detallado informe de las medidas implementadas para evitar un genocidio en la Franja.

"El Tribunal considera que no puede desestimar el caso, tal y como ha pedido Israel", han indicado desde la Corte Internacional de Justicia de las Naciones Unidas, incidiendo en que todas las partes tienen que cumplir lo dispuesto en la convención. "El Tribunal recuerda que adoptar medidas cautelares, en virtud del artículo 41, tiene como objeto la preservación de los derechos de las partes del caso. Por ello, podrá ejercer su poder siempre que la parte que pide estas medidas las haga plausibles, y solo puede decir este Tribunal que los derechos que reclama Sudáfrica lo son", ha expuesto.

Las medidas cautelares han recibido el voto en contra de los jueces israelíes y ugandeses, si bien han contado con el respaldo de la mayoría de los magistrados que componen el TIJ.

Las razones de la ONU para sustentar la denuncia de Sudáfrica

El Tribunal ha recordado la definición de genocidio que se expone en el artículo 2 de la convención, que relata que consiste en "matar a miembros de un grupo racial, étnico o religioso o infringirle unas condiciones de vida negativas". Además, ha insistido en que "para que se pueda considerar este delito, es exigido que se haya destruido una parte del grupo".

Algo, ha destacado, que se cumple en la Franja de Gaza: "Los palestinos parece que constituyen un grupo étnico, racial o religioso, por ello el Tribunal determina que la población palestina en la franja de Gaza, de 2 millones de personas, suponen una parte sustancial de ese grupo. El Tribunal destaca que la operación militar que está realizando Israel ha resultado con un gran número de fallecidos y heridos y un daño extenso a las infraestructuras civiles", ha recordado La Haya, que ha mencionado que más de 25.000 palestinos han muerto y más de 3.000 viviendas han sido dañadas".

Para cimentar el dictamen, el Tribunal también se ha servido de los informes de organismos internacionales que ya han mencionado que "Gaza se ha convertido en un lugar de muerte y desesperación en el que las familias duermen en la calle y las instalaciones médicas se ven destrozadas", así como estudios de la OMS sobre el estado sanitario de la Franja de Gaza y la declaración emitida por la UMRWA sobre la amenaza continua de los civiles.

La CIJ también ha tomado para su resolución las palabras de algunos dirigentes de Israel que han llamado al "asedio" o han expuesto calificativos como "animales humanos" a los palestinos.

Una serie de indicios y actos que el Tribunal de La Haya determina "suficientes para concluir que los derechos de los palestinos en Gaza tienen que ser protegidos de un genocidio, y que Sudáfrica tiene el derecho de buscar que Israel cumpla con sus obligaciones".

"Consideramos que por la propia naturaleza al menos algunas de las medidas cautelares pedidas por Sudáfrica tienen el objetivo de conservar los derechos plausibles de los palestinos en Gaza", han indicado.

Además, el Tribunal ha determinado que existe el riesgo necesario para aprobar medidas cautelares de que estos derechos se vean vulnerados antes de su propia decisión, si bien ha señalado que "no tiene capacidad definitiva para adoptar medidas sobre los hechos" en este momento, y tiene que escuchar a ambas partes.

Las medidas cautelares

El Tribunal de La Haya ha dictado así seis medidas cautelares que el Estado de Israel tendrá que implementar en el plazo de un mes, cuando dará cuenta de nuevo ante la Corte Internacional de Justicia de las medidas aplicadas hasta el momento a través de un informe que también será remitido al Estado de Sudáfrica. Estas medidas son:

  • El Estado de Israel deberá, de acuerdo con sus obligaciones, implementar todas las medidas dentro de su poder para evitar cualquier acto que conlleve matar miembros del grupo, causar daños corporales o mentales a miembros del grupo e infringir al grupo maneras de vida que puedan destruir su condición física.
  • El Estado de Israel deberá garantizar de inmediato que su ejército no comete ningún acto descrito en el artículo que describe el genocidio
  • El Estado de Israel deberá mantener todas las medidas para evitar cometer un genocidio en la franja de Gaza
  • El Estado de Israel deberá adoptar medidas inmediatas y efectivas para garantizar servicios humanitarios suficientes y urgentes en la Franja de Gaza
  • El Estado de Israel deberá adoptar medidas efectivas para evitar la destrucción de pruebas sobre la prevención y el castigo del delito de genocidio sobre palestinos en la Franja de Gaza
  • El Estado de Israel deberá presentar un informe sobre todas las medidas adoptadas en el plazo de un mes para cumplir con sus obligaciones

Palestina celebra la decisión e Israel la considera "indignante"

El Ministro de Exteriores de la Autoridad Nacional Palestina, Riyad al Maliki, ha celebrado el fallo de la CIJ en un videocomunicado en el que ha afirmado que "Palestina da la bienvenida a las medidas provisionales ordenadas por la CIJ contra Israel hoy. Los jueces analizaron los hechos y la ley y fallaron a favor de la humanidad y la ley internacional". Por su parte, el Gobierno de Sudáfrica ha calificado el fallo como "una victoria decisiva para Estado de derecho internacional" y ha asegurado que marca "un hito importante en la búsqueda de justicia para el pueblo palestino".

El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, ha asegurado que la acusación de Sudáfrica "no solo es falsa, es indignante", aunque ha celebrado que el tribunal no haya ordenado el cese inmediato de las hostilidades. "Como todo país, Israel tiene el derecho básico a la autodefensa. El tribunal de La Haya rechazó con razón la escandalosa exigencia de privarnos de este derecho", ha insistido Netanyahu.

Antes del fallo el Gobierno israelí ya había defendido ante la Corte Internacional de Justicia que las acusaciones de comisión de genocidio contra la población palestina durante la guerra contra Hamás en Gaza son una "distorsión grosera" de la realidad y un esfuerzo implícito para privar al país de su "derecho a la autodefensa". Afirmaban así que en último término, solo valen para "abaratar" el delito de genocidio, el "crimen de todos los crímenes".

Este mismo jueves, el Gobierno israelí mostraba así su confianza en que La Haya desestimara las acusaciones "espurias y engañosas" de Sudáfrica y avanzaba que no iba a cambiar su operativa en Gaza.