Un terremoto de intensidad 5,8 sacudió la Isla Sur de Nueva Zelanda, sin que se hubiera informado de víctimas personales ni daños materiales de entidad.
El epicentro se situó a unos 17 kilómetros de la ciudad de Christchurch, según el servicio geológico de Estados Unidos, que mide la actividad sísmica en el globo y que precisó que el temblor no ha motivado la emisión de alerta de sunami en la zona.
Junto a otros países del Pacífico, Nueva Zelanda es sacudida con cierta regularidad por movimientos sísmicos. La Isla Sur del país sufrió en febrero de 2011 un devastador terremoto de intensidad 6,3 que costó la vida a cerca de 200 personas.