El Tribunal Supremo de EEUU ha decidido que podrán entrar en vigor algunas de las partes del veto migratorio del presidente, Donald Trump, que prohíbe la entrada en territorio estadounidense de refugiados y nacionales de seis países de mayoría musulmana.

Esta decisión implica que el Gobierno de Trump podrá negar la entrada al país de los individuos que no tengan familiares en territorio estadounidense o que no hayan tramitado ya su ingreso para trabajar.

El veto migratorio es impuesto por decreto a seis países de mayoría musulmana. Así, el Supremo restaura partes del veto migratorio y para refugiados, aunque en la práctica, las restricciones seguirán siendo similares puesto que podrá entrar en el país cualquiera con motivos laborales, familiares o de estudios.

"Accedemos a la petición del Gobierno de que se mantengan los requerimientos en la medida que estos requerimientos impiden la aplicación de" la orden ejecutiva de Trump "con respecto a los ciudadanos extranjeros que carecen de una relación 'bona fide' con personas o entidades de Estados Unidos".

La acción del Supremo, aprobada por unanimidad (9-0) especifica que el veto migratorio de Trump será efectivo excepto para las personas que tengan una relación 'bona fide' con el país, es decir, las que tengan algún vínculo con Estados Unidos a nivel familiar, laboral, educativo o de otro tipo.

En cuanto a la suspensión del programa de acogida de refugiados, los criterios serán similares. "La balanza se inclina a favor de la necesidad de la seguridad de la nación", señala el documento del Supremo. La argumentación del caso comenzará el próximo mes de octubre, ya que la decisión de admitir a trámite el caso ha sido anunciada este lunes, último día del periodo de sesiones del tribunal. El documento está publicado aquí.

Para Trump, esta decisión del Supremo es "una victoria muy clara para nuestra seguridad nacional". "Permite que se suspendan los viajes para los seis países con tendencia al terrorismo y que entre en vigor en su mayoría la suspensión del programa de refugiados", ha destacado Trump en un comunicado oficial. "Como presidente no puedo permitir que entre en nuestro país gente que quiere hacernos daño. Quiero a gente que ame a Estados Unidos y a todos sus ciudadanos y que sea trabajadora y productiva", ha argumentado.

Para el presidente, su principal responsabilidad "como comandante en jefe" es "mantener a los estadounidenses a salvo". "El dictamen de hoy me permite utilizar una importante herramienta para proteger a nuestra patria. Estoy especialmente satisfecho por que la decisión del tribunal haya sido 9-0", ha apostillado