Cuando Daria llegó a su hospital de Kiev para dar a luz a su bebé, no había médicos para atenderla: "Cuando llegamos al paritorio, todos estaban en el búnker", explica. Un centro en el que, además, la maternidad se ha tenido que desplazar al sótano del edificio. Estas son las consecuencias de una guerra como la que viven en Ucrania, país en el que los bebés llevan casi un años naciendo bajo las bombas.
laSexta visita uno de estos hospitales para conocer cómo, a pesar de todo, las profesionales sanitarias no se rinden, siguen trabajando día tras día y con la misma emoción ayudan a las mujeres a traer a sus hijos al mundo.
Vitalina, ginecóloga, nos explica que incluso se ha tenido que desplazar a las zonas ocupadas por las tropas rusas para ayudar en lo necesario. Además, muchas de estas mujeres se desplazan desde zonas desturidas, por lo que necesitan ayuda psicológica.
Los hospitales ucranianos han sufrido directamente la guerra. La OMS denuncia 747 ataques contra centros hospitalarios en Ucrania. Y en Lugansk, zona ocupada por los rusos, los que siguen en pie están tomados por las tropas, como en el que muestra el vídeo, y en el que la maternidad se ha convertido prácticamente en hospital de campaña para soldados.